Pues sí, confieso que casi me tenían convencido con lo del diseño inteligente.
Hasta que vi a Ratzinger y a Rouco Varela. Es imposible que haya nada inteligente tras ese diseño.
Pues sí, confieso que casi me tenían convencido con lo del diseño inteligente.
Hasta que vi a Ratzinger y a Rouco Varela. Es imposible que haya nada inteligente tras ese diseño.